La historia del farmacéutico

El boticario, antiguamente, era la persona responsable de la farmacia. Hasta el final del siglo XVII éste era el nombre que se le daba al maestro que atendía la botica, que era un establecimiento donde se preparaban los remedios que prescribían los médicos.

Desde el siglo XV, debían obtener el título de maestro boticario por medio de un examen para el que eran preparados por los maestros ya establecidos. Durante el siglo XVII y el XVIII, aparecieron varios libros de aprendizaje del arte de la farmacia. Desde comienzos del siglo XIX, en el que se regularon los estudios de Farmacia, desapareció el nombre de boticario y en su lugar apareció el de farmacéutico, estableciéndose como una profesión.

Hasta la primera mitad del siglo XX, la producción industrial de medicamentos era muy limitada. Los farmacéuticos se dedicaban principalmente a elaborar fórmulas magistrales a medida que los médicos prescribían. Hacia la segunda mitad, la producción industrial despegó y el sector farmacéutico experimentó un gran desarrollo, asemejándose más a lo que conocemos hoy: aparecieron muchos medicamentos de uso común, como los antibióticos de uso oral, los antihistamínicos o los analgésicos. Laboratorios Kampar aporta con fármacos, dispositivos médicos y productos de última generación, los que se utilizan en Europa, Norte y Sudamérica.